Controlar el gasto energético es una de esas tareas que puede marcar la diferencia en la cuenta de resultados de cualquier empresa. Si alguna vez te has preguntado por qué la factura de la luz sube o baja sin previo aviso, la respuesta puede estar en cómo gestionas la potencia contratada y el consumo diario.
Ajustar la potencia eléctrica es más que ahorrar unos euros al mes, pues es una forma de adaptar la energía a lo que realmente necesita tu negocio, sin pagar de más ni quedarte corto en algún momento. Muchas empresas revisan este aspecto solo cuando surge un problema, pero dedicarle un poco de atención puede evitar sustos y facilitar la planificación. Además, contar con información clara y opciones flexibles, como las que ofrecemos en nuestras tarifas de electricidad, hace que todo el proceso sea mucho más sencillo.
En este artículo, vamos a repasar por qué merece la pena revisar la potencia contratada y qué herramientas tienes a tu alcance para optimizar el consumo. Si buscas una gestión energética más eficiente y cercana, sigue leyendo.
Potencia contratada
La potencia contratada es el límite de electricidad que puedes usar a la vez en tu empresa. Si te pasas, salta el automático; si te quedas corto, pagas por algo que no usas. Por eso, conviene revisar cada cierto tiempo si la cifra que tienes contratada se ajusta a la realidad de tu actividad. Cambiarla es más sencillo de lo que parece y puede suponer un ahorro considerable a medio plazo.
Quizá no sepas que puedes modificar la potencia según las necesidades de tu negocio, por ejemplo, si tienes temporadas altas y bajas. En Aletteo puedes encontrar información sobre cómo ajustar este parámetro y qué opciones existen para cada tipo de empresa. Si te interesa profundizar, te recomendamos echar un vistazo a la sección de tarifas de electricidad, donde explicamos las diferencias entre tarifa indexada y fija, y cómo elegir la que más te conviene.
Además, si tienes dudas sobre el proceso o necesitas asesoramiento, puedes contactar con el equipo de atención al cliente. Ellos te ayudarán a entender la factura y a tomar decisiones informadas, sin tecnicismos innecesarios. Aquí la clave es la cercanía al resolver tus dudas y acompañarte en cada paso.
Herramientas y estrategias para optimizar el consumo
Hoy, muchas empresas apuestan por sistemas de control energético que permiten ver cómo y cuándo se consume la electricidad. Estos sistemas ayudan a detectar picos de consumo, ajustar hábitos y, en definitiva, gastar lo necesario. Si te interesa este tema, en nuestro blog encontrarás un artículo sobre sistemas de control energético para empresas que explica cómo funcionan y qué ventajas ofrecen.
Otra cuestión relevante es el dimensionamiento de la potencia según el sector. No es lo mismo gestionar una oficina que una fábrica o un comercio. Por eso, analizar las necesidades concretas de tu actividad puede evitar gastos innecesarios y mejorar la eficiencia. Si quieres saber más, puedes consultar el artículo sobre dimensionamiento de potencia para diferentes sectores, donde se explican casos prácticos y recomendaciones útiles.
Por último, si prefieres un trato directo y resolver tus dudas de forma personalizada, siempre puedes recurrir al formulario de contacto de Aletteo. Un equipo especializado contactará contigo y te orientará sobre cualquier aspecto relacionado con la gestión energética de tu empresa.
La gestión estratégica de la potencia es una oportunidad para ganar en tranquilidad, controlar el gasto y adaptar la energía a lo que realmente necesita tu negocio. Revisar la potencia contratada, aprovechar las herramientas digitales y contar con asesoramiento cercano te ayudará a marcar la diferencia de cómo usas la potencia energética de tu empresa. Si te animas a dar el paso, verás que gestionar la energía puede ser mucho más sencillo de lo que parece.